Por Carlos Andrés Aguilera *
@Aguilera_Ariza
La política pública debe generar condiciones para impulsar el mercado digital, pero así mismo, para innovar y competir en este escenario, el sector empresarial requiere desarrollar capacidades para transformarse digitalmente.
La evolución de la economía digital, así como sus dividendos sociales y económicos son el resultado de la interacción de diversos factores y actores del mercado. Un recurso de análisis para abordar el tema es el índice de evolución digital desarrollado por The Fletcher School – Tufts University. Este índice mide la transformación de las economías en el mundo avanzado y en desarrollo, mediante el análisis de los que considera como principales factores que rigen la evolución de un país en una economía digital: Demanda, oferta, entorno institucional e innovación.
De acuerdo con los resultados del índice 2013 y 2017, Colombia es clasificada en la zona de trayectoria donde se encuentran los países que tienen el potencial de desarrollar economías digitales fuertes. No obstante, ocupa la posición 44 del ranking que mide las trayectorias digitales de 60 países en su más reciente edición, en la cual, en los primeros lugares se ubican Noruega, Suecia y Suiza, y de América Latina la mejor posición la ocupa Chile en el puesto 30.
En este contexto, el CONPES 3975 de 2019 Política Nacional para la Transformación Digital e Inteligencia artificial, es un componente a tener en cuenta en el entorno institucional de Colombia para el avance de su economía digital. Entre las acciones definidas se encuentran la inclusión en la oferta del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, de servicios dirigidos a empresarios y emprendedores, para acompañar procesos relacionados con transformación digital, así como la articulación de iniciativas del Ministerio TIC en esa línea. De otra parte, indica que realizaran ajustes normativos para promover y consolidar un ecosistema de pagos electrónicos, así como para la actualización de la normativa relacionada con el surgimiento de modelos de negocios basados en nuevas tecnologías.
Es preciso señalar que el CONPES citado también considera un posible impacto de la transformación digital en la profundización de diferencias sociales e inequidad, teniendo en cuenta que “las industrias basadas en tecnologías de punta superan los niveles de productividad y rendimientos de las industrias tradicionales.”
Frente a lo anterior, es necesario resaltar que la oferta nacional hace parte de un mercado global, por tanto, el sector empresarial requiere desarrollar capacidades que le permitan incorporar tecnologías digitales y uso de datos para evolucionar sus modelos de negocio, es decir, optimización de procesos, desarrollo de bienes y servicios, así como la forma de relacionamiento con los grupos de interés. Este escenario de transformación de las organizaciones y su operación implica también la necesidad de realizar ajustes de acuerdo con las normas vigentes y, prepararse para las que eventualmente se introduzcan.
Por su parte el Estado, no puede quedarse rezagado en “la actualización de la normativa relacionada con el surgimiento de modelos de negocios basados en nuevas tecnologías.” Colombia requiere acciones instituciones coordinadas y oportunas, tanto en materia normativa como en la promoción de la innovación, el desarrollo de nuevas industrias y la atracción de inversión en estos sectores fundamentales para el crecimiento y el desarrollo económico. Es estar a la vanguardia en el escenario de la cuarta revolución industrial, identificando cambios e incorporándolos en beneficio de las personas, y así mismo, para promover la generación de valor y oportunidades de mercado.
* Director de Seguimiento a los Objetivos de Desarrollo Sostenible del Tanque de Pensamiento AlCentro