Por: Juan José Ramírez
Al declararse, por la Organización Mundial de la Salud, que el brote del nuevo coronavirus COVID-19 es una pandemia, esencialmente por la velocidad en su propagación, entre otros aspectos, es una medida, necesaria e incluso obligatoria, quedarnos en nuestras casas. Lo anterior, ha generado cambios en nuestro comportamiento social, que era prácticamente físico y se ha transformado en uno digital. Esto ha generado tal como lo señala, Asomovil y Andesco, un aumento ya casi del 80% del tráfico del internet lo que pondría, sí sigue creciendo en esas proporciones, en jaque la estabilidad de la red.
Este aumento tal como evidenciamos en todos nuestros hogares no se está generando de manera exclusiva por el teletrabajo o las clases por internet, sino que la principal fuente de demanda de banda ancha es el uso de streaming a través de plataformas como Netflix, Amazon y HBO go.
Por lo tanto, el mensaje inicial es que limitemos nuestras ganas de ver muchas series en plataformas digitales, y tengamos como propósito, por lo menos cada uno de nosotros ver un solo capítulo al día. Ver maratones completas de series reduce la calidad del video y limita el uso del internet productivo para la emergencia que vivimos, esto puede generar una crisis en el servicio, a pesar de los grandes esfuerzos de los operadores que como hemos experimentado nos han ofrecidos datos adicionales y lo más importante continuidad y calidad del servicio.
El deber de todos al utilizar el internet, y que somos privilegiados en tenerlo durante este estado de emergencia y confinamiento, es hacer un uso útil y responsable del mismo. Esto no significa aburrirnos sino por ejemplo retomar algunas aficiones como leer libros, jugar juegos de mesa, contarles historias a nuestros hijos, utilizar las líneas fijas para llamadas de voz, ver películas en reproductores de Blu-ray, armar legos, entre muchas otras aficiones, ya que esta en nuestras manos está que las comunicaciones no colapsen en este estado de emergencia.
El internet es usado por todos y debemos tener en cuenta desde el inicio de nuestro día que al usar nuestro celular inteligente, ver un video o consumir algún contenido de alguna plataforma, pensemos que estamos consumiendo y utilizando internet que es necesario para todos.
De igual manera, es una oportunidad frente a las tecnologías tradicionales como la radiodifusión sonora y la televisión abierta para ofrecer programación dirigida a la población joven ,que tal como indican varios estudios, es la más alejada de estos medios tradicionales.
En Argentina por los momentos críticos de emergencia, las plataformas como Netflix están reduciendo su calidad en el streaming, así como YouTube en Europa.
Todos, en compañía de operadores y entes TIC del gobierno, debemos procurar, al digitar un teclado o nuestra pantalla en nuestro celular, que el uso del Internet esté usado responsablemente.
*Director Dirección Tecnologías de la Información